Las personas viven justificando sus conductas. Y si prestamos atención, cada acto en la vida parece estar acompañado de un argumento. Todo lo que cada persona hace o no hace, si llega a ser cuestionado, se defiende con argumentos que respalden lo actuado. Una cierta actitud de estar a la defensiva, como si fueran a quedar expuestos si se los “descubre” haciendo lo “inapropiado”.
Lo descripto anteriormente no sólo es aplicable a discusiones de índole ideológico, que pueden presentarse en una mesa de un bar, café de por medio sino a tu día a día, en tu trabajo, en tu hogar, en tu vida… Es interesante comenzar a vislumbrar que cuando se defiende con uñas y dientes una postura, una idea, una elección, detrás de eso tal vez hay algo más…
Si se analiza con más detenimiento, a su vez, es posible detectar cierta repetición en la forma en que se esboza la argumentación, la acusación, el reclamo o lo que fuera. Esas posturas que emulan patrones repetitivos es lo que podemos denominar Roles.
Significado de Rol: El concepto está vinculado a la función o papel que cumple alguien o algo.
Partiendo de dicha acepción podemos establecer que el rol es también el papel que se le asigna a un actor en una obra de teatro, una película o una serie determinada.
Con lo cual entonces aquí estamos ante la presencia de un personaje, como en una obra de teatro. Pero también es cierto que el personaje de un obra de teatro tiene un libreto, ¿Te preguntaste quién lo ha escrito y qué contienen esas líneas?
En lo que respecta a conducta humana es fundamental entonces conocer cómo se compone nuestra estructura mental. Lo que se dice es que hay tres “roles” que generalmente actuamos, preponderando más uno que otro pero actuando los tres. Los roles son: el de víctima, el de salvador y el de verdugo.
Qué significa actuar la víctima? Significa usar la conocida frase: “Pobre de mí”, justificando tus postergaciones, la queja, el lamento y la frustración. O sea, no mueve un dedo en pos de cambiar su situación porque espera a… Y lo que está detrás de todo eso es, “la culpa es del otro”, por eso el reclamo eterno afuera por lo que no te dieron, dijeron, etc.
El segundo rol es el salvador. ¿Qué significa salvador? El que hace por los demás, porque es “buena” persona. Detrás de esa “bondad” hay un anhelo de reconocimiento y si no lo hubiera, aparece la conocida “pasada de factura”. En este rol también se esconden cuestiones de manipulación y poder ya que, ¿si alguien hace algo por ti, no está en cierta forma decidiendo por ti?
El tercer rol es el verdugo. ¿Qué significa verdugo? El que impone sus códigos y generalmente es quien va al choque e impone “su” verdad como LA verdad. Obviamente que es un generador de conflictos ya que no hay consideración hacia el otro y directamente es imponer.
Como mencioné antes son ROLES o sea, son personajes. Entonces si son personajes y antes hablé de obra de teatro y actores, es evidente que existe una posibilidad de cambiar al personaje, ¿no?
Justamente esa es la parte más difícil, porque si bien puedes llegar a descubrir que te quejas demasiado, por ejemplo, y por eso indirectamente alejas a los demás porque produce rechazo, esa conducta está muy arraigada. Demasiado arraigada diría…
Esos roles obviamente fueron “alimentados” en base a la historia familiar sumado a tus energías más “acordes”. Si hay una Luna-Neptuno por ejemplo, el rol del sacrificio encaja entonces por ejemplo, alimenta eso. Una persona con un Plutón fuerte en su carta puede alimentar el perfil de un verdugo. Una persona con mucho fuego tenderá a ser Salvador porque quiere sacar las papas del fuego como sea y hace por los demás.
El verdadero viaje comienza entonces cuando luego de Identificar qué es lo que repites como tu rol estrella decidas cambiar las líneas de tu libreto A CONSCIENCIA. y ahí comenzarás a desandar ese personaje. El verdadero y valioso desafío es que escribas TU propio libreto y lo actúes en el momento que TU decidas. ¡Muchos éxitos!
Ojalá hayas disfrutado de estas líneas, nos encontramos la próxima semana. ¡Hasta pronto!