¡Hola! Bueno, aquí nuevamente para compartir contigo lo relacionado al clima astrológico de estos días. Siempre hay energías que nos acompañan y aquí la posibilidad de sintonizar con ellas. Comencemos.
En estos días más recientes, el Sol hizo su ingreso al signo de Libra, produciéndose el Equinoccio de Primavera para el hemisferio Sur y el de Otoño para el hemisferio Norte. Momento interesante para considerar hacer ajustes y replantear qué de lo generado hace seis meses fue sincrónico con lo que deseabas y qué no lo fue. Simple de descubrir es analizando qué cosas que dijiste nunca más aún están presentes y que cosas realmente las desterraste de tu vida. Libra, al ser el signo opuesto de Aries, plantea justamente la posibilidad de balancear, sopesar y armonizar aquello que sigue desajustado. No es casual que esos signos coincidan con los Equinoccios, en donde luz y sombra están por igual.
Con ese escenario libriano de fondo, se produjo una tensión bastante grande entre Mercurio que está en libra con Marte que sigue retrógrado en Aries y se le suma al dúo, Saturno en Capricornio. Entre los tres, forman lo que se conoce como T Cuadrada. Es una configuración astrológica de máxima tensión e inestabilidad. La oposición entre Mercurio y Marte y las cuadraturas de ambos hacia Saturno producen que el vértice esté en el Señor del Karma. Si bien no están en aspectos directos, no hay que descartar que también están cerca de Saturno, Plutón y Júpiter, generando más peso en la zona. A nivel simbólico, significa que quien define allí esa tensión es Saturno, ya que está en el punto focal. ¿Qué significa todo eso? O bien, tendrás que prestar atención a no irte de boca y que el límite venga de afuera por ello (una sanción, por ejemplo) o, si es algo vivido internamente, tu mente sintiéndose provocada y por ende, sagaz y afilada al punto que lleve a frustrarte y paralizarte. Mucho cuidado entonces estos días, de no hablar lanzando dardos y en lugar de eso, incentivar tu mente con nuevas ideas que te permitan avanzar y crecer.
Todas estas configuraciones, son intensas, pero no para asustarse sino para que te movilicen por dentro y generen ansias de crecimiento y evolución interna. A ese grupo que está en Capricornio, se le suma la Luna que está pasando por allí, habiendo generado la fase de cuarto creciente. Entonces, aquí también está en juego el factor emocional, lo cual puede provocar sensibilidades y jugar en contra respecto a ese hablar de más. Cuando hablamos de Fase Cuarto Creciente, es momento de dar forma en concreto a eso que inició en la fase de Luna Nueva, interesante que luego de esa lunación, la Luna pase por el grupo que está en Capricornio. O sea, esa fase que es de acumulación de energía se incentivará aún más con todo ese grupo de planetas que allí están.
En síntesis, semana para realizar todos los ajustes necesarios, considerando aquello que no habías considerado, balanceando y armonizando librianamente. Preparando tu energía para dar forma con criterio y empuje a todo aquello que te has propuesto conseguir. Hay energía muy intensa para ser utilizada, dirígela hacia tus objetivos. ¡Buena semana!
Carolina Capmany
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