¡Qué semanita que se viene! No asustarse, como dice don Miguel Ruiz en su libro Los Cuatro Acuerdos, uno de ellos es No te lo tomes a personal. ¿Por qué cito esa frase? Porque estos días las energías están muy en tensión en lo que respecto a deseos que quieres concretar, las trabas que quizás sientas que los demás “te hacen” y cómo ese escenario puede llegar a generarse a través de tus vínculos.
En estos días, hay un gran tensión llamada T cuadrada, se produce cuando hay tres planetas en tensión: dos en oposición, y el tercero en ángulo de 90° respecto de los otros dos. Se forma un triángulo, el planeta que “define” el conflicto es el tercero. Y aquí los involucrados en esta trifulca son Marte que está en el signo de Leo, enfrentado a Saturno que está en Acuario y en ángulo de 90° a ambos está Urano en Tauro. Gran tensión y provocación también. A su vez, la energía involucrada es en relación a lo que se conoce como cruz fija, los signos fijos: Tauro, Leo, Escorpio y Acuario. Son signos que, como su nombre indica, fijan, sostienen y consolidan cuestiones. Cada uno en un elemento distinto estableciendo lo que implica “sostener” o “fijar” de ese elemento en particular. Y eso tiene repercusión por las dos vías: lo constructivo y lo destructivo. Es decir, fijar para consolidar o fijar por demás estancando un proceso.
Marte y Saturno son muy antagónicos, lo que significa, que son muy diferentes y chocan de por sí. Marte habla de avanzar, de ir a la acción, de luchar y Saturno en principio, es límite, distancia, frialdad. Entonces, que estén enfrentados de lo que habla es de choques o “frenos” ante lo que deseas, limitaciones a tus impulsos. Y si los signos involucrados son Leo-Acuario, la cuestión aquí radica en la lucha reconocimiento ajeno versus reconocimiento propio. Pedir reconocimiento, o sea, anhelar un lugar y a su vez, querer diferenciarte, ser original. Y la lucha es porque diferenciarte implica que no te reconozcan, que te den la espalda y tu leonino interno no le da lo mismo. La primera reacción tal vez sea que al querer expresar tu individualidad, lo que te apasiona, lo relacionado con tu auto expresión, algo de afuera lo frena por considerarlo quizás excéntrico, revolucionario o una ocurrencia. Y aquí es donde no habrá que resolver desde lo automático uraniano, salir corriendo sino entender que aquí hay otra información a considerar.
Esa tensión de lo que está hablando es de una provocación pero no de los demás que “no te dejan ser” sino una movilización para que dejes dicho que realmente luchas por lo que quieres y que no te frena lo que puedan opinar los demás. Si hay críticas, juicios de valor, entender quién lo dice, en qué se fundamenta y simplemente tomarlo como un aporte, SU punto de vista. No es una VERDAD, es lo que el otro opina y punto. Es muy importante con esta tensión reinante no enojarse con los demás ante las críticas o comentarios desvalorizantes, el clima está tenso para tomárselo a mal y si así sucede pisarás el palito de la aprobación externa. Si te sirve como parámetro, si te molesta tanto la no aprobación de personas de tu entorno, quiere decir que tienen poder sobre ti. Su opinión pesa más que tu decisión, que tus elecciones y ahí ya tienes una pauta de qué cosas trabajar. La energía de Urano en vez de usarla para salir corriendo o desconectar, mejor derivarla a encontrar respuestas distintas a cómo sueles reaccionar y responder ante los demás.
A todo lo anterior, se le suma que Venus que también está en Leo, se sumará a la tensión de esa T cuadrada, con lo cual VÍNCULOS: atención. Puede que surjan tensiones a través de tus vínculos, las personas que eliges para compartir tu vida puede que tomen posiciones que no te agraden. No se trata de hacerlas a un lado, sino de entender qué te están mostrando, que te espejan y entender qué hay ahí para considerar. Lo más importante a tener presente es que si la carta natal es una matriz que involucra nuestros vínculos, entonces esos vínculos que se expresan están representando a funciones de tu carta que te están diciendo algo. Esto es para entenderlo en profundidad por ejemplo en el Curso de Astrología en donde analizamos estas configuraciones, entre otras cosas.
Lo fundamental entonces, es lograr no tomarte a personal lo que sea que las circunstancias presenten y descubrir la profundidad de las energías involucradas. Al no tomártelo a personal, no hay algo que defender y ante todo, lograr alimentar tu seguridad interior al valorar lo que estás eligiendo en tu vida, independientemente de lo que opinen los demás. ¡Buena semana!
Carolina Capmany
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